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| Croagh Patrick, Irlanda |
¡Hoy en
Saint Patricks' Day! Una fiesta irlandesa que poco a poco se está popularizando en nuestro país. Como ya sabréis, San Patricio es el patrón de Irlanda y una las principales hazañas que se le atribuyen, es el expulsar a todas las serpientes venenosas de Irlanda. Esto lo hizo ayunando durante 40 días y 40 noches en un monte cerca de Westport llamado el Reek o Croagh Patrick famoso por su peculiar forma cónica. En la actualidad, subir a este monte sagrado es un acto de penitencia para los miles de peregrinos que se acercan cada año, el último domingo de julio. El paisaje que rodea al monte es espectacular, merece la pena llegar hasta allí. Cuando estuvimos en Irlanda, nos acercamos a verlo y fue genial. Un viaje maravilloso del que guardo muy buen recuerdo. A ver si me siento un día y hago memoria para poder contaros un poco de la ruta que hicimos.
Pues bien, volviendo al tema de la fiesta... aquí en Madrid hay multitud de tabernas irlandesas que lo celebran. Para aquellos que no hayáis ido nunca, de verdad que os animo. Es uno de los mejores recuerdos que guardo de las noches madrileñas y eso que no me gusta le cerveza... El ambiente es súper festivo y para aquellos freakys de la cultura anglosajona como yo... es vuestra oportunidad para poder practicar un poco vuestro inglés.
Sin embargo, mi mejor Saint Patricks no ha sido aquí en Madrid. Hablo en pasado porque hace bastante que no celebro Saint Patricks' como se merece. Desde que trabajo es muy difícil encontrarme en la calle más tarde de las 12 de la noche entre semana...si, soy como cenicienta, pero sin carroza!
En fin, pues mi mejor San Patricio fue sin duda el del 2000, durante mi año de Erasmus en Newcastle. Estuvimos todo un día desde las 10 de la mañana que quedamos en el Lucky's (un pub de la zona) celebrándolo. ¡Y fue genial!
Así que chicos, os dedico esta tarta en recuerdo de aquel año maravilloso que pasamos 5 nebrijanos en el condado de Northumberland. :D Por un año memorable!
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| Cinnamon Tales |
Esta tarta la encontré buceando en la página web de Nigella Lawson una famosa cocinera británica. Me llamó la atención por estar hecha a base de cerveza Guinness y pensé que era perfecta para este día. Uno de los atractivos mayores de esta tarta, aparte de su aspecto, es precisamente que entre sus ingredientes se encuentra esta conocida cerveza negra, atípico para una tarta, pero tremendamente acertado ya que otorga una textura densa y húmeda al pastel.
Como a mi no me gusta la cerveza (y he probado de todo tipo ...) . al ver esta receta, anduve un tanto recelosa a probarla. Menos mal que finalmente me decidí a hacerlo, pues a pesar de llevar casi un botellín entero de cerveza, no se aprecia para nada su sabor. Al contrario, el resultado es una mezcla de chocolate y caramelo tostado que está buenísimo. Se trata sin duda de una de mis tartas favoritas.
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| Cinnamon Tales |
La tarta intenta simular el aspecto de una pinta Guinness, imitando su cuerpo negro y espuma blanca representada por el frosting. Hay que resaltar que el frosting es perfecto en esta tarta, contrastando con la intensidad del pastel.
Ingredientes:
250 ml cerveza negra Guinness stout
250 gr. mantequilla
75 gr. cacao en polvo (utilicé Valor)
250 gr. azúcar (en la receta original pone 400 gr. pero a mí particularmente me parece demasiado)
140 ml. de nata líquida para montar
2 huevos
1 cdta. de vainilla líquida
250 gr. harina para repostería
2 y media cdtas. de bicarbonato
Para el frosting:
300 gr. queso tipo Philadelpia
100 gr. azúcar glas
360 ml. nata líquida para montar
Elaboración:
Calentamos el horno a 180º C y engrasamos un molde redondo de 28 cm de diámetro con mantequilla.
Ponemos en una olla la cerveza a calentar a fuego medio, sin que llegue a hervir, cuando esté caliente le añadimos la mantequilla cortada en trozos y lo vamos moviendo hasta que la mantequilla se derrita completamente, lo retiramos del fuego y reservamos.
En un bol ponemos el cacao, el azúcar, la harina y el bicarbonato y lo mezclamos hasta que queden bien ligados todos los ingredientes y de un color uniforme.
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| Cinnamon Tales |
En otro bol, ponemos la nata líquida, los huevos y la vainilla líquida y lo mezclamos. A continuación añadimos el contenido de la olla y lo mezclamos nuevamente hasta integrar bien ambas mezclas.
Una vez tenemos la mezcla líquida terminada se la vamos incorporando a los ingredientes secos y con unas varillas lo mezclamos enérgicamente hasta conseguir una masa uniforme y sin grumos. Esta mezcla habrá de quedar bastante líquida para que la textura de la tarta resulte sea jugosa.
Pasamos la masa al molde engrasado y lo horneamos durante 50 minutos aproximadamente o hasta que lo pinchemos y veamos que sale limpio.
Una vez transcurrido el tiempo, lo sacamos y lo dejamos enfriar. Mientras preparamos el frosting, mezclando el queso y el azúcar con un batidor eléctrico, hasta conseguir una crema suave, después le añadiremos la nata que previamente habremos montado y lo mezclamos con movimientos suaves hasta que estén bien integrados ambos ingredientes, conseguiremos una crema ligeramente untuosa que pondremos sobre a tarta ya fría.
¡Qué la disfrutéis!
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| Cinnamon Tales |
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| Cinnamon Tales |
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| Cinnamon Tales |
