Hoy os traigo una receta salada para variar un poco de tanto dulce. Pero sólo por un día, eh? La receta la encontré en la revista americana a la que estoy suscrita y de la que ya os he hablado en alguna ocasión, Better Homes & Gardens.
La verdad es que esta pizza nos ha gustado mucho y es muy fácil de hacer. Quizás lo único rollo es que haya que dejarla levar por la noche, pero por lo demás, se trata de un proceso bastante rápido. ¡Y fácil!
1+ 3/4 cups de agua a temperatura ambiente
Preparación:
En un bol ponemos la harina tamizada y el resto de ingredientes salvo el agua. Con la ayuda de una cuchara de madera, vamos echando agua poco a poco y mezclando con la cuchara. Cuando adquiera una consistencia grumosa, comenzamos a amasar con las manos. Si veis que la masa necesita más harina porque se queda muy pegajosa, id echando de cucharada en cucharada poco a poco. Si por el contrario, la masa es demasiado seca, nos humedecemos las manos con agua. En mi caso estas fueron las medidas exactas, pero esto depende del tipo (marca) de harina que utilicemos.
Continuamos amasando durante 10 minutos hasta obtener una masa manejable nada pegajosa. Formamos entonces una bola y dejamos reposar en un bol grande engrasado con aceite. Cubrimos con papel film pero que éste no toque la masa. Debe haber bastante distancia, pues la masa levará su volumen al menos el doble.
Dejamos reposar en lugar fresco durante 30 minutos y después dejamos en la nevera durante toda la noche. Puede estar ahí hasta 3 días, ya que seguirá creciendo.
Al día siguiente cortamos la masa en 4 partes y formamos con cada una de ellas una bola que dejaremos templar sobre papel de hornear engrasado con aceite durante 2 horas.
Ahora viene la parte difícil, aunque divertida: dar forma a la masa. Esto es cuestión de práctica y la verdad, yo opté por hacerla rectangular pues me pareció más fácil :D Pero si tenéis maña y conseguís una pizza circular a la primera, me contáis el truco, eh?
No es que sea una apasionada de las pizzas, pero cuando vi la receta en esta revista, me pareció un reto al que no me pude resistir.
Normalmente prefiero las pizzas americanas ya que la masa es más gruesa y lo genial de esta receta es que puedes customizar la pizza a tu gusto.
La verdad es que esta pizza nos ha gustado mucho y es muy fácil de hacer. Quizás lo único rollo es que haya que dejarla levar por la noche, pero por lo demás, se trata de un proceso bastante rápido. ¡Y fácil!
Os recomiendo que probéis a hacerla en casa porque estoy segura de que va a gustar a todos. Es perfecta para cocinar entre amigos. acompañada de un buen vino.
Así que si más dilaciones, aquí va la receta.
Ingredientes:
5 cups de harina de fuerza
1 cucharadita de azúcar (o miel)
1 + 1/2 cucharadita de sal
1 sobre de levadura de panadero
2 cucharadas de aceite de oliva1+ 3/4 cups de agua a temperatura ambiente
Preparación:
En un bol ponemos la harina tamizada y el resto de ingredientes salvo el agua. Con la ayuda de una cuchara de madera, vamos echando agua poco a poco y mezclando con la cuchara. Cuando adquiera una consistencia grumosa, comenzamos a amasar con las manos. Si veis que la masa necesita más harina porque se queda muy pegajosa, id echando de cucharada en cucharada poco a poco. Si por el contrario, la masa es demasiado seca, nos humedecemos las manos con agua. En mi caso estas fueron las medidas exactas, pero esto depende del tipo (marca) de harina que utilicemos.
Continuamos amasando durante 10 minutos hasta obtener una masa manejable nada pegajosa. Formamos entonces una bola y dejamos reposar en un bol grande engrasado con aceite. Cubrimos con papel film pero que éste no toque la masa. Debe haber bastante distancia, pues la masa levará su volumen al menos el doble.
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| Cinnamon Tales |
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Al día siguiente cortamos la masa en 4 partes y formamos con cada una de ellas una bola que dejaremos templar sobre papel de hornear engrasado con aceite durante 2 horas.
Ahora viene la parte difícil, aunque divertida: dar forma a la masa. Esto es cuestión de práctica y la verdad, yo opté por hacerla rectangular pues me pareció más fácil :D Pero si tenéis maña y conseguís una pizza circular a la primera, me contáis el truco, eh?
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| Cinnamon Tales |
En cuanto a los ingredientes, podéis poner lo que queráis. Nosotros abrimos la nevera y cogimos lo que teníamos. Hicimos una de champiñones, cebolla, calabacín y pimiento verde y otra de bacon, champiñones y cebolla. Como toque especial añadimos tomillo, albahaca y orégano.
Tarda en hacerse más o menos unos 10-15 minutos (dependiendo del horno) a 200º.
Y por fín tenéis vuestra deliciosa pizza casera. ¡Imposible resistirse!
